martes, 11 de septiembre de 2018

Comienza la tormenta.


4 comentarios:

  1. Buen trabajo con esa poca luz. Buenos reflejos en los coches. Abrazo Joselu

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    1. La noche es un mundo que me atrae. Le dediqué un tiempo a fotografías -en color- nocturnas. Aquí en esta imagen la oscuridad se enseñorea del espacio en más del ochenta por ciento. Solo quedan reflejos de unos ojos que intimidan y nos atraen magnéticamente. Estamos delante a punto de que la tormenta estalle. Lástima que el cielo en esta foto no refleje el dramatismo que tenía solo hacía unos segundos. Muchas gracias por tu comentario.

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  2. Tu lo has dicho, toda la atención la reclaman esos focos misteriosos que parecen desafiarnos en esa hora de la noche donde la oscuridad se apodera de la noche. Una zona, por cierto, muy poco iluminada, no se si es que aun no se habían encendido las farolas o que directamente hay pocas en la zona. Pero la foto es muy sugerente, puro misterio, a través de esos faros que nos miran amenazantes uno puede imaginar toda una historia.

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    1. La foto no es todo lo que pudiera haber sido pues estos son los momentos en que va a empezar a diluviar y el ambiente está enrarecido y el cielo, cambiante y dramático. Me di cuenta de la foto que quería hacer en la calle, junto al portal de mi casa. Subí rápidamente por la cámara, pero no conseguí en esta foto captar el dramatismo del cielo que era increíble. Tuve que combinar el aspecto del cielo con que apareciera algún vehículo con los faros encendidos porque segundos después empezó a descargar el agua a raudales y tuve que recogerme. Efectivamente, las luces de la calle estaban apagadas no sé cuál era el motivo, pero sí, me parece una foto que tiene interés aunque podría haber sido mucho más impactante si en esa centésima de segundo hubiera podido fotografíar el estado tenso y dramático de las nubes encima de la ermita de San Ramón.

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