sábado, 18 de marzo de 2017

El vendedor de alfombras


8 comentarios:

  1. Uaoo!!! Esta me gusta mucho, te has guardado algunas de las mejores para el final. No se que ha pasado, las dos o tres primeras que nos enseñaste tenían mucho ruido y eran bastante imperfectas, pero conforme ha ido avanzando la serie las fotos son más nítidas y tienen encuadres más atinados. Este me gusta especialemente porque los elementos pricipales están más aislados y yo ya sabes que soy mucho de hacer fotos más simples y con pocos elementos. La escena de nuevo es de un tipismo muy destacado, el gesto de cansancio de la mujer es muy marcado. En fin, está muy bien.

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    1. Hoy tenía que ir a caminar por una ruta nueva. Pero ayer una cena que se prolongó me dejó sin suficientes horas de sueño. Me hubiera gustado hacer fotos del paisaje.

      Me alegro de que te guste.

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  2. Joder, si las miradas mataran...

    Desde luego son tremendas, muy expresivas, parecen esquivas y amenazantes, intimidantes diría yo, como negando el hecho fotográfico.

    Pero ahí esta la foto mostrando aspectos de esa cultura en una escena que aporta al observador valiosa información sobre la misma.

    Y bien mostrada, sin elementos que distraigan, como occidental me resulta muy curiosa la exposición de la mercancía así como la actitud del comerciante.

    Hecho de me menos quizá algo de espacio por la derecha, pero a lo mejor no interesaba...me parece un buen documento.

    Un abrazo Joselu.

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    1. A la derecha había otros sujetos que no aportaban mucho a la foto. La corté por ahí porque me parecía más acertado. Sí, es cierto, las miradas y la postura física dicen mucho de la comunicación que allí había. Buen observador.

      Un abrazo.

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    2. Disculpa, estoy con fiebre y mi ortografía lo acusa...

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  3. Sin duda, lo mejor de la foto es la interacción de los personajes.

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  4. Para mi es sin duda la mejor de la serie hasta el momento. El hombre enmarcado por sus alfombras y la mujer contra el fondo negro dibujándola con precisión...y ese contacto visual entre ambos que no llega a producirse pero está ahí, como una amenaza, como un misterio, como eso que buscamos en la fotografía, lo que desconocemos.

    Un abrazo.

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